Toda persona es bienvenida a su puesto de trabajo, pero en este caso la llegada de Jacobo ha supuesto una gran alegría después de meses sin ordenanza en el centro y esta alegría se nos ve en las caras porque es un hombre diligente, servicial, cuidadoso, amable, educado, trabajador y con iniciativas. ¿Qué más se puede pedir? Sólo una cosa: que se quede muchos años en el instituto y siga contribuyendo al buen funcionamiento del centro y al ambiente cordial del IES.
Gracias por tu actitud y compromiso.
Bienvenido y que sea por muchos años

Francisco Campos Maza

Director del IES Ulia Fidentia