A comienzos de este curso se ha jubilado nuestro compañero Curro Aguilar. El pasado 3 de octubre sus compañeros del IES Ulia Fidentia y antiguos compañeros del CEIP Miguel de Cervantes lo hemos homenajeado y previamente él tuvo la deferencia de despedirse con una generosa invitación. Reproducimos aquí las palabras que se le dedicaron en la cena homenaje del 3 de octubre.

Querido compañero Curro:

Estamos ante un momento que todos sabíamos que iba a llegar pero que al menos yo personalmente no deseaba. Desde el curso pasado eras el último mohicano, el último maestro del IES Ulia Fidentia que se jubila, y tal vez no somos conscientes de lo importante que ha sido vuestra aportación en la puesta en marcha de la nueva estructura educativa que supuso la LOGSE, adelantando el comienzo de la educación secundaria a los 12 años. Esta dichosa crisis con sus incertidumbres de todo tipo ha hecho que tengas que tomar la decisión de jubilarte cuando tal vez te hubiera gustado seguir algunos años más.

Curro y Joaquín Sánchez

Tengo que decir que en todo momento me he sentido en los 14 años que hemos trabajado juntos en nuestro departamento de francés, que estaba ante un maestro en el más amplio y hermoso sentido de la palabra. Nos conocimos en el año 2000, yo acababa de incorporarme al sistema LOGSE después de unos años alejado de la enseñanza. Llegué al edificio del colegio, que por entonces albergaba provisionalmente a la Sección del IES Francisco de los Ríos de Montemayor. Rápidamente todos me dijeron: “tu compañero de asignatura es Curro” y yo me dije: vamos a ver cómo es este Curro. De entrada, y fundamentalmente me pareciste una buena persona, y esa intuición se confirmó con los años. Pero además, a medida que pasaban los días y los meses de aquel primer año me di cuenta de que estaba ante un gran profesional. Tú fuiste es el que me enseñó en qué consistía la evaluación de conceptos, procedimientos y actitudes; ese sensato modo de evaluar que ahora nos prohíben expresamente utilizar los inspectores y que hemos tenido que sustituir por las competencias.

Sobre todo, Curro, lo que tú has aportado al centro en los años en que hemos tenido la suerte de trabajar contigo, ha sido mucho sentido común; cuántas veces has repetido tu frase favorita de: “las normas, poquitas, y que se cumplan”. Pero fundamentalmente, lo que has tenido claro es que hay que tener en cuenta a las personas por encima de las estructuras. Cuántas veces habremos hablado tú y yo en nuestro departamento de aquellos alumnos que no encajan en el sistema educativo y a los que rápidamente se etiqueta en función de una cosa tan pasajera como unas malas notas o un mal comportamiento en plena adolescencia. Alumnos que pasados los años son buenos trabajadores, padres y madres de familias normales y ejemplares.

Curro (de pie, 5º por la izda.) en su etapa como maestro del CEIP Miguel de Cervantes

Siempre has sido un ejemplo de sosiego, de buscar el diálogo; nunca te he visto rellenar un parte, pero eso no ha significado que no tuvieras problemas con los alumnos sino que buscabas otros medios para solucionarlo. Te acordarás perfectamente de aquella comisión de convivencia que creaste estando todavía en el edificio de la escuela a la que yo me incorporé el año que llegué. Era un foro donde alumnos y profesores dialogábamos sobre las malas conductas y se buscaba llegar a un punto de encuentro donde el transgresor aceptara su responsabilidad. Aquello funcionó muy bien, pero cuando más tarde, ya siendo yo jefe de estudios intenté seguir con ese espíritu de trabajo, no me fue posible; nunca encontré ese punto de serenidad y de reflexión que tú aportabas.

Curro, sé perfectamente, sabemos perfectamente, que el francés nunca fue tu opción didáctica fundamental, tú siempre te has considerado por encima de todo como maestro de lengua y siempre has mimado todo lo que era el fomento de la lectura recreativa, animar a que el alumno lea por placer, a centrarte sobre todo en las clases de lengua española en fomentar en el alumno su faceta comunicativa, saber expresarse, hablar en público, expresar sus ideas, tu dedicación a la biblioteca del centro… Pero aunque como he dicho el francés no era tu opción primera, tus alumnos han recibido una preparación de primera categoría. Lo comprobaba año tras año en 3º de ESO, en ese curso en el que la LOGSE no te dejaba impartir clase, cuando me hacía cargo de tus alumnos de 1º y 2º y comprobaba el magnífico nivel que traían.

Estos días no he tenido empacho en decir que hemos sido uno de los equipos más estables del instituto en los últimos 14 años, junto a Pepa y Loli en Ciencias Sociales. 14 años de departamento de francés formado siempre por Curro y Joaquín; tan solo un año tuvimos además a Loles, pero tú y yo siempre ahí; viviendo buenos y malos momentos, viendo cómo llegaban reformas educativas y nosotros al pie del cañón echándonoslas a las espaldas e intentando siempre sacar lo positivo de cada situación. Para nosotros fue un acicate enorme hacer frente al bilingüismo y al enorme cambio que nos supuso ese reto, y lo supimos afrontar, y tú cumpliste tu papel con una profesionalidad admirable.

Sabemos que tienes la intención de seguir colaborando con el centro y ya estás en la tarea de buscar la forma; ojalá se concrete porque el bagaje y la experiencia de personas como tú no se pueden perder. No me quiero extender más, tal vez me he dejado muchas cosas en el tintero pero no quiero terminar sin decirte públicamente que eres una gran persona, que has sido un gran compañero, un maestro, y que ya te estamos echando de menos.

Joaquín Sánchez